martes, 24 de septiembre de 2013

A veces lloro

Hoy es uno de esos días que me alegro de tener curro. Y ya sabéis cual es mi situación con el trabajo. Pero me he dado cuenta que entre plano y plano no pienso en otras cosas.
Pero hoy alguien me ha hablado de mi otro antiguo amor, mi antiguo trabajo y noto como se me revuelven las tripas. Es una sensación parecida a la que siento por mi amor exiliado (que por si no lo deje claro ya tiene quien le haga feliz, y es que las hembras de esas islas, son mucha hembra, no te podías haber ido al pais basco o a Madrid, no, tuviste que escoger el paraíso)
Volviendo al tema del curro y pese a q me va a días, jode que las personas que te han hecho daño sigan allí más felices que una perdiz. Aunque también habría que mirar su situación desde dentro, tengo la sensación de que aún escucho las carcajadas de ganamos nosotros y Mírate pidiendo trabajo en la competencia... Algo bastante lejano a la realidad. Igualmente estos reencuentros me hacen daño, nunca he sido de huir, pero creéis que me debería marchar y cambiar de sector para poder empezar de cero? O seguir en lo mismo?
Se que no debería quejarme, pero más que una queja es un lamento. Es como cuando un bebé llora al venir al mundo, hace segundos flotaba en el líquido amniótico y ahora la gravedad le molesta y no entiende que pasa. A mi me sucede un poco igual, no entiendo que sucede, no se como interpretar el mundo y a veces lloro.

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